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Sunday, March 22, 2020

Mensaje del Director de Asuntos Religiosos Erbaş, en la noche de Mirach

En el mensaje de la noche de Mirach publicado por el Director de Asuntos Religiosos Prof. Dr. Ali Erbaş, quien felicitó la noche de Mirach del mundo islámico y señaló la importancia que el islam otorga a la vida humana y afirmó que es el deber más básico de todos cumplir con las medidas tomadas por el Estado contra el coronavirus.

Queridas hermanas y queridos hermanos,

Esta noche, espero que entremos la noche de Mirach, cuando nuestro Profeta fue llevado de Másyid al-Haram a Mezquita de Al-Aqsa y de allí al cielo.

Mirach, que contiene mucha sabiduría, expresa el viaje profundo, milagroso y lleno de sabiduría del poder y los versos eternos de Alá.

A pesar de toda la negatividad y las dificultades, Mirach es un regalo divino que muestra aquellos que viven con la creencia en tawhid, adoración, paciencia y dirección que nunca se quedarán solos e indefensos. De hecho, durante la Meca de Risalet, que era un momento extremadamente duro, problemático y triste para nuestra Profeta y los primeros musulmanes, el milagro de Mirach tuvo lugar como una bendición de Alá y ha sido un gran consuelo y un apoyo divino para el Mensajero de Alá y los creyentes.

El equivalente del Milagro, manifestado en la persona del Profeta, ante todos los creyentes es la oración. Porque la oración cinco veces al día, que es uno de los resultados más importantes del milagro de Mirach, es la única forma de elevarnos a emociones sublimes limpiando nuestros deseos espirituales que estrechan nuestra alma. La oración es alcanzar la infinita misericordia y el perdón de Alá trascendiendo los límites del mundo físico.

En resumen, Mirah es el corazón pacífico en la seguridad de la fe en Alá, una vida directa en la línea de la lealtad al Profeta y un futuro brillante en la alegría de la oración. Por lo tanto, debemos reforzar aún más nuestra fe en Alá, nuestra lealtad en nuestro Profeta (sav) y nuestra oración en la noche de Mirach, que es una de las paradas importantes de nuestra vida limitada.

Por otro lado, esta noche también impone la responsabilidad de proteger el honor de la Mezquita de Al-Aqsa, el santuario del Mirach. Hoy, nuestra primera Alquibla, Mezquita de Al-Aqsa y Jerusalén, están oprimidos y tristes. Deberíamos salvar a la Mezquita de Al-Aqsa como una herancia de los Profetas y el legado de nuestra antigua civilización y liberarla y restaurar la responsabilidad cual herencia nos corresponde. La forma de salvar el santuario de la ocupación y la persecución es alejarse de todo tipo de acciones y discursos que perturben nuestra unión y actúen en unidad. Nuestro objetivo es esperar el surgimiento de la Ummah islámica con la determinación, voluntad y diligencia que equiparemos para este propósito.

Otro punto que quisiera recordarle a nuestra nación con motivo de esta noche bendecida es la necesidad de luchar juntos contra el nuevo tipo de pandemia de coronavirus, que se ha convertido en un peligro global y ha matado a miles de personas porque aún no hay una cura. Porque nuestra religión, que considera la limpieza como la mitad de la fe, mantiene la vida y la salud humana por encima de todo lo demás. Por esta razón, debería ser nuestro deber principal cumplir con las medidas anunciadas por los Organismos competentes de nuestro Estado.

Además de esto, debemos actuar con sinceridad en estos días de prueba y abrir nuestras manos a la gran misericordia de Alá Todopoderoso, y pedirle ayuda, con paciencia y oración, al mundo islámico como también para toda la humanidad. Debemos saber que la clave de todas las dificultades y problemas del mundo está en el poder de Alá. Sin duda, "Alá es el mejor protector, y es el más misericordioso de los misericordiosos".

Con estos sentimientos y pensamientos, felicito la noche de Mirach de nuestra nación y de todo el mundo islámico. Pido a mi Alá que esta noche bendita conduzca el mundo islámico y toda la humanidad a la salvación.

Prof. Dr. Ali Erbaş

Director de Asuntos Religiosos